Desconto:
-5%Antes:
Despois:
5,92 €¿Y si el mayor error de tu vida regresara? para hacer temblar todo lo que creías haber superado?Doce años. Un corazón roto. Un reencuentro inevitable.Candy Acevedo¿Crees en las casualidades? Yo sí. O, al menos, creía? hasta que en mi vida apareció Víctor de Silva. Me hizo tocar el cielo con una mano y, en cuestión de semanas, me arrojó al infierno sin frenos ni red de seguridad. Tuve que huir. Abandonarlo todo. Marcharme del país con un corazón hecho trizas, un alma rota y una sola idea clavada como un ancla: vengarme algún día. Hoy, doce años después, el destino ?cruel, irónico o empeñado en vernos caer otra vez? decide cruzarnos de nuevo. Y no para saludarnos, no. Estamos obligados a trabajar juntos. Yo ya no soy aquella chica. Soy más fuerte, más dura, más mía. Pero entonces? ¿por qué cada vez que lo tengo cerca mi corazón late como si aún le perteneciera? Porque hacer que un corazón roto vuelva a sentir? debería ser imposible. ¿O no?Víctor de Silva¿Casualidades? No creo en ellas. Nunca lo hice. Y Candy Acevedo jamás fue una. Yo provoqué nuestro primer encuentro. Yo sellé nuestro destino, sin que ella lo supiera, con una estúpida apuesta que acabó convirtiéndose en el mayor amor ?y la mayor tragedia? de mi vida. Cuando creí descubrir que todo había sido una farsa por su parte, juré odiarla. En esta vida y en todas las que vengan. Ahora, doce años después, nos vemos obligados a colaborar en el mismo proyecto. Y aunque me he vuelto más duro, más inaccesible y más cínico? ella sigue siendo mi punto débil. La odio. La detesto. Me destrozó. Pero cada vez que la tengo cerca, cada vez que siento su respiración rozando mi piel? Mi corazón late como si aún creyera que puede recuperarla. ¿Una locura? Tal vez. Pero algunas locuras? son imposibles de evitar.Una novela que lo tiene todo: amor, rabia, pasión, secretos, y esa clase de tensión que te deja sin aliento. Porque hay historias que no son una casualidad? son destino.Quela Miranda domina como pocas la tensión emocional, el drama romántico y los diálogos con filo, construyendo personajes complejos que se quedan contigo mucho después de cerrar el libro.